Entre el maltrato y la locura, la sororidad

Estábamos preparando la cena de Noche Buena , veníamos de una excursión, excursión en la que casi un jabalí acaba con nosotras, nos perdimos y, como nos suele pasar a las mujeres, tuvimos que lidiar con las actitudes y agresiones del maltratador de turno.
Después entendimos que esa jabata era una señal, señal que apareció ante nosotras para que luchasemos y protegiesemos a nuestro clan.

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